TERROR ANALÓGICO: EL DIABLO EN UN VHS

 "No contento con los sufrimientos reales, el ansioso se impone unos imaginarios"

                                            - Emil Cioran

Yo soy de esos que crecieron teniendo como tótem del terror a los creepypastas. Ya sabes, esas leyendas urbanas americanas que surgían en 4Chan o Reddit y cuyos mayores exponentes eran Slenderman, Jeff the Killer o Ben Drowned.

Pues al igual que mi generación creció con ellos y la anterior creció con los slashers, la actual está creciendo con un formato que me hace tenerles envidia: el terror analógico.

Básicamente, el terror analógico se basa en pequeñas series en formato de vídeos de YouTube grabadas y editadas de forma que parezcan un VHS. A diferencia de los creepypastas, su trama se centra en narrar muy finamente acontecimientos extraños relacionados con entes sobrenaturales.

Y lo admito, muchos son muy originales.

The Mandela Catalogue, por ejemplo, cuenta cómo un pueblo estadounidense lidia con los alternos, unos seres que toman la forma de conocidos (aunque deformados) para incitar a las personas al suicidio. Uno de ellos incluso se hizo pasar por el arcángel Gabriel para evitar que anunciara el nacimiento de Cristo.

Otro de los populares es Monument Mythos: ¿qué pasaría si los monumentos del mundo hubieran sido construidos para contener una especie de "árboles especiales"? Es alrededor de lugares como la Estatua de la Libertad o el Monumento a Washington donde se enreda una trama política y metafísica para descubrir qué son esas cosas y porque están en nuestro mundo.

Terminaré esta lista con uno que me enganchó: Happy Meat Farms. Una empresa de la industria cárnica oculta secretamente a unos grotescos seres llamados musas que, una vez escapan de su cautiverio, se cuelan en casas y manipulan a los residentes para que las alimenten.

Créeme, es curioso que algunas de estas series tengan un mejor guión que muchas películas de jumpscares gratuitos actuales. Y sí, también se está intentando trasladar esto a la literatura.